Seguidores

martes, 7 de junio de 2016

Renunciamos a lo que queremos por miedo, 
por vergüenza, por imposibilidad...
Renunciamos porque sabemos que somos débiles, pero no queremos que lo sepan los demás.
Nos da pánico las debilidades. 
Y sobretodo, nos da pánico que nos descifren.
Que nos abran en canal, 
que nos perforen el alma y hagan tiras de ello.
Somos tan débiles que parecemos valientes. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Gracias por tu aportación...